Australia demandó oficialmente a China ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por los aranceles impuestos por Pekín a sus vinos, anunció este sábado el gobierno.
La demanda se interpuso tras consultas con los productores de vino australianos, precisó el gobierno, que se declara abierto a una negociación directa con China para resolver este problema.
Australia y China están enzarzadas en un conflicto comercial. El primer ministro australiano, Scott Morrison, ya había advertido que su gobierno respondería a todos los países que intentaran hacer uso de la «coerción económica» contra ella.
La medida se anunció días después de la cumbre de los siete países más industrializados, el G7, en el Reino Unido, donde Australia abogó por actuar con más firmeza frente a las prácticas comerciales de China.
Durante los últimos meses, Pekín impuso sanciones económicas a una serie de productos australianos, como los aranceles sobre los productos agrícolas, el carbón o los vinos, así como medidas contra el turismo.
Muchas voces en Australia estiman que se trata de represalias contra el rechazo a inversiones chinas en sectores considerados estratégicos y contra la petición de Australia de que se investiguen los orígenes de la epidemia de coronavirus, que comenzó en China a finales de 2019.
Australia ya presentó una demanda contra China ante la OMC por los aranceles sobre sus exportaciones de cebada.