La exvicepresidenta Margarita Cedeño de Fernández rechaza las cancelaciones de servidores capacitados en el tren gubernamental y lo califica como indolencia, una afrenta a la institucionalidad del país.
Dijo que la expresión “se van” condena a muchos empleados públicos honestos a la pobreza y al sufrimiento.
“El ruego de una señora es el sentimiento de muchos. El «se van» está condenando a muchos servidores públicos honestos y trabajadores a la pobreza y el sufrimiento. La indolencia en contra de los que estaban es una afrenta a la institucionalidad del país», escribió Cedeño de Fernández en su cuenta de Twitter.