La decisión que han adoptado algunas panaderías del país de vender el pan a dos unidades por quince pesos, es para reajustar el incremento de los costos de producción que en la actualidad deterioran a ese sector.
Así lo aseguró Issaachart Burgos, presidente de la Unión Nacional de Pequeños y Medianos Industriales de la Harina (UMPIH), al sostener que hacen todo lo posible para “mantenerse” como productores.
“Nuestro mayor deseo es poder mantener, como hemos mantenido por muchísimo tiempo, los precios del pan para poder seguir ofreciendo nuestros servicios, pero claro, que sea rentable”, indicó.
Dijo que no quieren aprovecharse ni perjudicar a los consumidores, y señaló que quieren mantener la estabilidad en el precio del pan. “No se nos puede pedir que trabajemos con pérdidas”, expresó Burgos.
En febrero de este año el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) y la Unión Nacional de Pequeños y Medianos Industriales de la Harina (UMPIH) anunciaron que el pan de agua y sobao mantendrán su precio de 5 pesos la unidad.
Sin embargo, este acuerdo ya no está vigente, de acuerdo con lo informado por el presidente de UMPIH.