“Dios está en control” fueron la únicas palabras que expresó la pastora Rossy Guzmán a su salida de la sala de audiencias, tras conocer la ratificación de la primera sala de la Corte de Apelación del Distrito Nacional.
Guzmán cumple la medida de coerción de 18 meses en la cárcel Najayo Mujeres, luego que el pasado 10 de mayo, la Jueza Kenya Romero, de la Oficina de Atención Permanente del Distrito Nacional acogiera la solicitud del Ministerio Público.